Nuestra Historia

Guillermo Camacho

Propietario

Todo comenzó en mi primer año de preparatoria. Recuerdo que estaba en una cafetería en el campus, rodeado de compañeros de clase, cuando me di cuenta de algo. A todos nos encantaba el café, pero siempre faltaba algo: un lugar que no solo sirviera café, sino que fuera cómodo, con una atmósfera relajada, y sobre todo, accesible para los estudiantes. Los cafés del campus eran caros o muy formales, y el único lugar donde realmente podíamos estar era la biblioteca. Pero, ¿por qué no podía haber un lugar donde también pudiéramos estudiar, hablar y relajarnos con una buena bebida?

Así nació mi idea: abrir mi propio café. Algo sencillo, pero con mucho corazón. Quería que fuera un lugar para nosotros, los estudiantes, pero también para todos aquellos que valoran un buen café y un espacio para desconectar del estrés académico.